Cavilaciones, escritos de días cualquiera, algunos poemas , algunas de mis novelas, pensamientos en soledad compartida,...¡VISITA MI WEB! EN WWW.ANANAYRAGORRIN.COM

viernes, 26 de agosto de 2011

EL MEJOR CISNE DE LA BANDADA





Este pasado fin de semana, en XLSemanal (suplemento de un conocido diario) leí un artículo de Ángel Luis Esteban << Noches de Gloria >> (las pasiones y tragedias de Gloria Vanderbilt) a razón del último libro inspirado en su biografía The World of Gloria Vanderbilt, de Wendy Goodman (editado por Abrahams) que, por cierto, no tardaré mucho en buscar para devorar como lectora ansiosa que soy. El artículo plasma con gran precisión los momentos más álgidos de la vida de esta Diva.

Su perfume, Gloria Vanderbilt, siempre me fascinó, es uno de mis favoritos. Pero este materialismo no tiene nada que ver con los atisbos de la gran genialidad, plasticidad, creatividad y excentricidad imaginativa que debió (según este artículo) tener esta Señora (que hoy en día tiene 87 años y aún -creo- seguirá dando motivos para que corran ríos de tinta).

Desde su infancia dolorosa: su padre falleció cuando ella sólo tenía 1 año y 3 meses, y su madre se olvidó de ella entregándose a la vida nocturna con las drogas, alcohol, promiscuidad(o, como se dice en mi pueblo, puterío) y la locura sin freno. Lo cual hizo que se le atribuyera la custodia de la pequeña Vanderbilt (que en esta época contaba con 10 años y ya había vivido todo un infierno junto a su ausente Madre al más puro estilo Amy Winehouse)a una de sus tías arrebatándosela a la madre. Pero antes de llegar a los brazos de su tía, Gloria Vanderbilt fue a parar a una especie de centro tutelado, sólo que de alta gama (para niños ricos, pobres niños ricos).

Mujer apasionada y enamoradiza de adulta. Con secuelas psicológicas por su infancia llena de carencias afectivas. Tuvo 4 matrimonios, todos con hombres de poder. Muchos amantes, uno de ellos el mítico Marlon Brandon. Así como Frank Sinatra, Gene Kelly,...

Tuvo, ya de adulta, que sufrir el dolor de perder a uno de sus cuatro hijos. Viendo como se arrojaba por un rascacielos ante su atónita mirada, sin ella poder hacer nada por evitarlo. Al parecer al chico, de 23 años, le dio un brote psicótico.

Aún así, ella sobrevivió, tras hundirse en una fuerte depresión. Y, pese a que perdió (por fraude de su abogado de confianza) la empresa que aún hoy en día lleva su nombre: Gloria Vanderbilt, ella siguió adelante. Como siempre había hecho.

Su capacidad artística llevó a acuñar sus óleos en pasteles de la famosa marca Hallmark, en vajillas, cuberterías, ropa de capa, colchas, y distintas firmas especializadas en diseños del hogar.


Elegante, a veces hostil como un cisne, dócil ante los hombres de los que se enamoraba como sutil paloma blanca, pero fiera como águila real cuando de otear el horizonte en soledad se trataba: Gloria Vanderbilt.

Siempre admiré, a través del tiempo y de las distintas fotos que he ido viendo de ella, la elegancia de sus posados. La longitud de su cuello de cisne que sólo ella sabía aprovechar con la sutileza de sus poses ante la cámara. Acuñando así un estilo único al posar: el estilo Vanderbilt.

Fue ella la que inventó los tan femeninos pantalones vaqueros de mujer, los altos a la cintura y ceñidos para marcar la cintura y recalcar las nalgas. ¡Ésos que tanto me gustan! Ella innovó en su época con estos jeans pues demostró que la sencillez es elegancia.

¡¡Uno de sus jeans, con una blusa estilizada y los collares y calzado adecuados vestían con elegancia!! En una época en la que el hecho de que una mujer llevara pantalones no estaba muy bien vista, fue todo un shock estético cultural.

Dejo ahora transcrito un párrafo del artículo que leí:

- Le pregunté hace años qué había hecho para sobrevivir, después de tanta tragedia desoladora. - Cuenta su hijo.

Ella me respondió: Imaginé que en mi interior había un diamante duro como una piedra que nada ni nadie podía jamás alcanzar.


En S/Cruz de Tenerife, a viernes 26 de agosto de 2011.

sábado, 13 de agosto de 2011

CATARSIS NECESARIA




Matices de tristeza ondean, esporádicos, en mi marea.
Con un gran agujero negro en mi inquieta alma,
me he ido paseando por esta divergente vida.

La mayor de mis alegrías, mi fuerza, es mi esperanza:
mi Hijo, quien en su inocencia infantil que puedo susurra.

¡Que puedo con todo! Por él, mi vida y corazón entero.
Aunque desfallezcan mis fuerzas y otee la desilusión,
a veces, en el horizonte inexistente de esa clase de amor.

Yo llenaré esos teñidos océanos de ilusión vaga,
vaga mas inagotable, vasta, nítida y cristalina.

Errores de mi vida que caros he pagado, férreos en mi conciencia
que como alarma me reclaman lo que ser pudiera,
con un esfuerzo que me llevará años, minutos de mi sacrificio
tornaré con la ayuda de Dios el negro en verde esperanza.

Llegar a los cuarenta en paz con metas realizadas,
y, ante todo, mi hijo feliz y adolescente sereno.

Ése es el rumbo de mi felicidad, ése es mi final sino.

Al margen de quienes el pie me ponen con alegría,
de quienes en mi día a día se nutren de mi tristeza
para regocijo de sus retorcidas mentes y podridas almas.

Ana Nayra Gorrín Navarro.

En S/Cruz de Tenerife, a sábado 13 de agosto de 2011.

miércoles, 10 de agosto de 2011

¡MÁRCHATE YA!


Desaparece. Me robas la inspiración para cualquier cosa intelectual que deba desarrollar, me robas la energía para cualquier trabajo. Me das cansancio, fatiga, me bajas la tensión arterial.

Me doblegas ante el deseo de irme al Polo Norte, lejos de ti.


Me lastimas el sentimiento de felicidad con el que me suelo despertar cada mañana para retransmitir a mi hijo la buena honda de la vida nada más abrir los ojos.

Haces que mis noches sean largas, ¡imposible conciliar el sueño contigo aquí!

¡MÁRCHATE YA!

No soporto tu intensidad en fastidiarme.

A decir verdad, NO ME GUSTAS NADA.

Por ti se marchitan mis soñados campos de amapolas multicolores, se ponen mustias todas las flores.

Aún no entramos en la segunda quincena de agosto, ¡todavía queda mucho que aguantar!

No se puede salir a la calle por tu culpa. No se puede hacer deporte al aire libre de día. No se puede ni respirar cuando encima te fundes con tu amiga africana, la calima. ¡¡MÁRCHATE YA SEÑOR CALOR INSOPORTABLE DEL VERANO!!

lunes, 8 de agosto de 2011

ME GUSTA





Me gusta, contemplar a mi hijo cuando no sabe que lo observo. Verle jugar feliz y ratificar cuánta imaginación tiene.

Me encanta, la carcajada de mi hijo, ¡el mejor sonido de este Mundo y de todos!

Me gusta, los hoyuelos que se le forman a mi hijo en los mofletes cuando se ríe (herencia mía, pero es que en él ¡¡se ven tan preciosos!!).

Me gusta, la gente que te mira a los ojos cuando te habla. Aún teniendo el corazón lleno de murallas para protegerse por haber sufrido mucho en la vida.

Me gusta, el olor del café recién hecho.

La verdad, aunque duela.

Estar en la playa por la tardecita, cuando cae Magec, mi Sol Guanche, y ver cómo en el horizonte acaricia tierno a La Mar antes de meterse en ella.

Me gusta, la Luna Llena y su luz hipnotizadora. Máxime si es en compañía de alguien por quien sientes pasión.


Me gusta, llamar a las cosas por su nombre, pese a quien le pese y pase lo que pase.

El flamenco y sus voces gitanas de mujer (¡ah, Estrella Morente!). La música árabe y sus voces moras masculinas (¡ay, Hakim de Marruecos-España!).

Los almuerzos de los domingos en familia. Con tanto bullicio alrededor y nuestro perro Braco de regazo en regazo mendigando un pedacito de carne (ya que sólo come pienso, pero los domingos todos le hacemos el capricho).

Me gusta, la mirada tierna de Braco hacia Nayar cuando mi hijo se pone a jugar con él, aún habiéndole despertado de su siesta. Contemplarles jugar y ver la paciencia que tiene Braco con mi hijo.

Me gusta, pensar que el futuro es un gran campo abierto en forma de una gran llanura llena de verdor y flores multicolores. Un campo de amapolas tal vez, pero de todos los colores.

Imaginarme llegando a ser anciana, con el cabello lleno de nieve y rodeada de muchos nietos/as a quienes contarles mil y una historias y aventuras.

Me gusta, la gente que siempre ríe. Que te saluda con una sonrisa y mira fijamente a los ojos, aún sin conocerte.

Me gusta, la gente educada y disciplinada que no se rinde en conseguir sus objetivos pese a las vicisitudes que en su camino se pongan.

Me gusta, la gente que se marca metas y una vez las consigue va a por metas más altas.

Me gusta, bailar con la música a todo volumen (desde que soy madre, uso cascos) y dejar en la tierra todas las energías sobrantes que fluyen por mi cuerpo.

Me gusta, el sonido de los darbukas y el frenesí que pone en mis caderas.

Me gusta, el sabor de las especias árabes. El sabor de los mojos canarios, mejor en compañía de unas buenas papas arrugadas.

Me gusta, escuchar los poemas que aún pululan por la mente de mi Abuela Jacinta, ¡tan bien que los recita!

Me gusta, la sensación que me produce medir a mi hijo cada x tiempo y contemplar ¡¡cuánto ha crecido!! Y la cara de emoción que pone cuando contempla ante el espejo por dónde me llega ya.

Me gusta mi pueblo natal, mi gente, mi familia.

Me gusta, la unión aférrima y espíritu colectivo de mi gente canaria. ¡Qué buena honda!

Me gusta, el olor de los Eucaliptos, de las vides, y de la tierra recién mojada del Valle de Arriba.

Me gusta, pasear por las calles peatonales de La Laguna. ¡El frío lagunero! Especialmente en invierno y el ambiente que hay en sus calles.

Me gusta, salir con mis amigos/as a tomar unas copas ( no tienen por qué ser con alcohol), al cine, a la playa, o de fiestas de pueblo. Compartir anécdotas, reir juntos/as, sentir que sienten confianza en mí y que yo puedo confiar en ellos/as.

Me gusta, ser un hombro en el que llorar. Y que acudan a mí cuando las cosas van mal, pues eso es la prueba de la verdadera amistad.

Me gusta, sentir la fuerza de las quenas y zampoñas y ese vibrar de mi alma cuando la música andina puedo escuchar.

Me gusta, sentir que estoy viva, ¡ y todo lo que tengo por dar y entregar a los demás !

Ana Nayra Gorrín Navarro.

Lunes, 08 de agosto de 2011.