viernes, 27 de enero de 2017

LOS INGREDIENTES YA LOS TENEMOS

 Este 21 de enero de 2017 inicié formalmente de la mano de alguien, mi buen hombre, un camino. Llena de amor, fe, esperanza, ilusión, pasión y, ante todo, madurez. Pues ambos quisimos andar juntos por un sendero y transitar proyectos (que no fantasías) de hacer y construir mucho juntos. Partiendo de una linda amistad plena de confianza mutua. (Bueno, voy a omitir el trato que te di hace años. Amor mío por favor perdóname, era una niñata que andaba de despechada por la vida, tenemos toda la vida para que me permitas compensarte por ello). El destino, pese a todo, se empeñó en unirnos y, como dice la canción de Leona Lewis: "A moment like this" que me dedicaste y que casi muero de amor cuando leí la letra, hay personas que se pasan toda la vida esperando por vivir un momento como éste que estamos viviendo nosotros ahora y nunca lo consiguen.



 Los ingredientes ya los tenemos: 1) amor 2) diálogo constante y sincero, 3) capacidad de entrega al otro 4) confianza y fé en el otro 5) ilusión, mucha ilusión 6) perseverancia y, por último pero no menos importante, 7) pasión.



 Significas mucho para mí, mi fortaleza con doble Torre. Siempre seré tu sostén cuando decaigas, porque no todos los días se puede tener la felicidad que ambos compartimos desde que estamos juntos. Vendrán días grises y ahí estaré yo para llenar de color y luz tus días. Para decirte que todo lo que quieras hacer, ¡¡lo has de hacer!! Te daré la fuerza y el empujón necesarios. Tú mejor que nadie sabes el valor de la vida y de estar vivo. Por ello, ¡¡atrapemos la vida, abracemos nuestros sueños y no para sólo soñarlos sino para cumplirlos juntos!!

 Que no importa lo que el sino nos depare a cada uno, si queremos estar juntos siempre buscaremos las razones y los motivos para estarlo.

 Tú con tus obligaciones y responsabilidades, yo con las mías. Pero al final fusionaremos todo en el cóctel especial del amor y nos beberemos la vida sorbo a sorbo, trago a trago, mirándonos a los ojos directa y fijamente y alimentándonos de nuestras miradas. ¡¡Tu mirada, tan pura y limpia!! ¡¡Tan llena de bondad y valía!!

 Y aquí estamos, de nuevo cara a cara con ese viejo conocido que es el amor. Pero, esta vez, como dice la canción de Barry White que tanto nos gusta tú serás "mi último, mi primero, mi todo". Porque ahora puedo entender por qué he llegado a esta edad sin que nunca funcionara con nadie hasta que llegaste tú, porque ahora puedo entender por qué siento tanta paz y se han esfumado todos mis miedos a amar y sentir, porque desde que despierto hasta que me acuesto todo en mi vida está lleno de ti. Eres mi último, mi primero y mi todo.


 Me encanta cuando siento tu abrazo por mi espalda. Tu cuerpo y el mío hechos para encajar a la perfección como piezas de un puzzle. Tus 1,85 y mis 1,73. Tu nariz sumergida en mi cabello y respirando en mi cuello. Nuestras manos entrelazadas mientras contemplamos absortos el cielo estrellado, abrazados en algún rincón de nuestra isla frente al Mar, ¡¡nuestro mar canario!!

 ¡¡Me siento bendecida al tenerte en mi vida!! Soy una mujer muy feliz y dichosa. Que Dios te bendiga y nos conceda la dicha de permanecer SIEMPRE UNIDOS, vida mía.


 Has hecho que yo desarrolle la confianza en mí misma de una diva, la felicidad de una niña, la sensibilidad de un recién nacido y las ganas de mirarle a los problemas y decirles: ¿Qué pasa? No vas a amargarme nunca lo suficiente, porque, ¿sabes qué? Detrás de mí tengo a un gran hombre, que me impulsará siempre a salir adelante con su fortaleza espiritual y, pase lo que pase, junto a él encontraré un nuevo camino, abriré una nueva ventana y cerraré las que ocasionen en mí angustia y tristeza. Y el mismo efecto ocasionaré yo en él. Y por más que tuviera problemas en su vida, nuestra vida, le daré la fuerza necesaria para afrontarlos. Mutuamente nos alimentaremos las ganas de vivir siempre con ilusión y de que cada mañana cuando amanezcamos, juntos, no nos falte JAMÁS un motivo por el que luchar, JUNTOS.





 ¡¡¡Te quiero y te amo, hasta el infinito y más allá!!!





viernes, 20 de enero de 2017

COMENZAMOS EL 2017



Mi hijo, el epicentro de todo, es el motor de mis días. Lucho cada día porque no baje en sus calificaciones escolares y porque tenga una infancia muy feliz. Con todo lo que necesita. Gracias a Dios cuento con el apoyo de mis padres, sus abuelos maternos, para apoyo moral porque estar sola no es fácil. Pero, teniendo la familia que tengo y el apoyo de ellos, me hago fuerte y de ser frágil como un pétalo de rosa me convierto en piedra dura e inquebrantable. Marcharnos de la casa de mis padres como nos marchamos, en mayo de 2016, no fue fácil, pero yo debía continuar con mi vida y tomar el timón de ella. Nayar y yo debíamos asumir nuestro propio rumbo.





 En 2017 lo comencé con jaleo sentimental. Despidiendo el año 2016 triste por la ausencia de alguien. Pero era una persona que no podía estar a mi lado. Su destino ya fue decidido hace años y a él se debía.



 A parte, tuve la noticia de que alguien de mi pasado, a quien yo ya no puedo corresponder, me extrañaba y ambas circunstancias quebraron mi alma y espíritu un poco, sumergiéndome en una crisis emocional leve pero presente.

 A Dios gracias, entró el 2017 y enero ha ido resolviendo muchas cosas. Finalmente he dado por zanjada esa fantasía, ese espejismo de realidad cobijado por las redes sociales, de un amor que era imposible y que, a todas luces, me iba a hacer mucho daño. Pero que me hizo desarrollar cierto apego, ya estaba pendiente de recibir sus llamadas, sus mensajes, sus canciones,…, y soltar ese amarre no es fácil. Porque a nadie le amarga un dulce y sentirse cobijado por el afecto y el cariño de alguien es reconfortante. Pero no,…, no quiero meterme en medio de nada ni ser un secreto para nadie. Por eso, he convertido mi corazón en piedra y le he hablado con dureza y firmeza. Su destino está ya decidido. Ahora falta por escribir el mío en ese terreno sentimental.


 También en enero me he abierto como una flor de loto a conocer a alguien que llevaba tiempo tocando a mi puerta y que yo, por estar obnubilada con esa fantasía imposible y que, como ya dije, estaba claro que me iba a acabar haciendo mucho perjuicio, no presté la atención debida. ¡Cuando es un hombre increíble! Honesto, leal, luchador, buen padre (es divorciado y tiene hijos), con una profesión muy afín a mi perfil y con una trayectoria vital también muy afín a mí (él tampoco acabó la carrera, aunque opositó a funcionario y se dedica a ello profesionalmente). Lo veo una persona íntegra, centrada y mentalmente muy equilibrada. Y me ilusiona conocerle. Me ilusiona muchísimo. Me encanta conversar con él. Y ya con esto tiene mi cielo ganado pues que yo me sienta cómoda conversando con un hombre ya es un gran paso. Es un hombre muy culto y con tendencia y sensibilidad artística. Me agrada mucho.


 Yo todo lo consulto con mi Madre. Si ella no me da el visto bueno para algo. Tarde o temprano, y aunque yo me ponga a relinchar como una yegua desbocada al principio, acabo cediendo, razonando y dándole la razón. Simplemente porque desde que soy madre no subestimo el instinto materno para alejar el mal de la vida de nuestros hijos.

 Laboralmente se me abre una etapa fascinante pues quiero avanzar en la vida y no quedarme estancada. Sobre todo y ante todo he de demostrarme a mí misma que tengo mi autoestima en su justo nivel y que aunque tenga miedos, puedo superarlos. Pues no es más valiente quien no siente miedos, sino quien sintiéndolos se enfrenta a ellos y los supera. Y ahí voy, hacia delante siempre y cuando me lo permitan, con todo mi ánimo de poner todo de mí para hacer las cosas lo mejor posible y de estar a la altura de las expectativas que tengan depositadas en mí.








 ¡AMO LA VIDA Y QUIERO AFERRARME A ELLA! Con toda mi ilusión, raciocinio y pasión, conjuntamente. Porque sin ilusión no se puede hacer nada bien, sin raciocinio no se va a ninguna parte y sin pasión la vida acaba teniendo un color gris oscuro deprimente. ¡¡Necesito los tres elementos en mi vida!!

 Llevo tres años y medio sin pareja y ya es hora de darle un poco de color a mi vida. No  quiero decir que voy a forzar nada pero,…, si el amor toca a mi puerta ya no le voy a dar con la puerta en las narices como he estado haciendo estos tres años y medio.




 Para todo hay un tiempo, hay un tiempo para cada cosa.