Antes que nada, he de advertir que todo cuanto voy a escribir aquí lo he aprendido en las series coreanas y lo he leído en internet (en www.esade.edu). Yo nunca he viajado a Corea, ni del norte ni del sur. Quisiera hacerlo alguna vez. Me gustaría conocer, sobre todo, Seúl, la capital de Corea del Sur. Quién sabe si después no me gusta o, ¡sorpresa!, me termina gustando más la Corea Comunista del Norte que la del Sur. Por tanto, lo que aquí escribo es por lo que percibo de las series coreanas (surcoreanas) a las que tanto me he aficionado y que me han hecho sentir curiosidad por aprender todo lo que pueda de esta civilización asiática que tanto me atrae. Me gusta cómo tratan con tanto respeto a las personas, la empatía que muestran siempre, cómo siempre se muestran sonrientes y simpáticos, cómo son de disciplinados, educados y trabajadores. Me gusta cómo visten y cómo se comportan. Su actitud ante la vida. Para colmo, me encanta la gastronomía asiática. ¡Me parece que comen muy sano y rico! De hecho, en las series están todo el tiempo cocinando y comiendo. Sin embargo, ellos casi no tienen problemas de obesidad ni de anemias. Y tienen unas pieles y cabellos impecables.
En las series coreanas, que es importante decir que son todas
producciones de Corea del Sur, se deja patente el gran deseo de superación
personal que manifiesta esta gente. Se rigen por la cultura del esfuerzo. ¡Da
gusto ver cómo les ilusionan sus trabajos! Su nación les permite poder tener
recompensa a sus esfuerzos. Ellos trabajan una media de 14 horas diarias (algo
que están luchando por cambiar y reducir a 8 horas como el resto de Europa y
EEUU), pero también ganan mucho más que nosotros y con lo que ganan pueden
comprarse una casa, tener coche, poder vivir bien. En España, por más que te
mates a trabajar, ya esto hoy en día no te garantiza que puedas adquirir una
casa, mantener un coche, pagar la gasolina y cumplir con todos los gastos
normales de una persona adulta, ni teniendo un trabajo. Es más, si tienes dos
trabajos, Hacienda te castiga y te saldrá a pagar cuando haces la declaración o
te ponen un IRPF altísimo. De verdad, en España parece que se castiga al que
tenga cultura del esfuerzo y se premia a los vagos que viven de las ayudas y
las paguitas.
Por esto me causa tanta admiración Corea del Sur. Sí, un país profundamente capitalista. Pero ¿acaso no da felicidad poder comprarte cosas con el dinero que tú has sudado trabajando? Sin perjuicio de que dones una parte de tus ingresos a asociaciones, ONG's o fundaciones que hagan activismo social por el bien colectivo. Por ejemplo, yo dono una parte de mi nómina a la Fundación Ana Bella de supervivientes de violencia machista, también a Amnistía Internacional y a GreenPeace, soy socia y voluntaria de las tres y considero que mi labor es de este modo más importante que la de muchos "perroflautas" vendedores de humo que se llenan la boca en contra del sistema, pero viven a costa del bolsillo de todos los que sudamos para trabajar cada día. Y, a la hora de la verdad, sus palabras se las lleva el viento y terminan siendo ellos mismos meras cargas para todos/as.
Que tengas cada noche la satisfacción de poder dormir bajo tu propio techo y no viviendo del alquiler que a duras penas puedes pagar, que cada año durante tus vacaciones puedas viajar a donde te plazca, comprar ropa bonita, tener un coche bueno que puedas también mantener, comprar productos de calidad incluso para alimentarte bien. Y para quienes me digan: si tienes hipoteca la casa no es tuya, es del banco. Miren: las hipotecas, trabajando, se terminan de pagar, y al final ese bien inmueble va a ser de tu propiedad. Si tienes hijos, tendrás la dicha de dejarles esa casa en herencia y encima los bienes inmuebles no pierden valor económico sino muy al contrario, últimamente lo están ganando.
Envidio a los ciudadanos surcoreanos que con su trabajo
pueden comprarse una casita y ser felices. En España no podemos tener esa
dicha. Tengo 44 años y creo que jamás podré tenerla.
En la serie “King
the land”, por ejemplo, me llama mucho la atención la excelencia en la
gestión hotelera que ejercitan. Además, en cómo ponen el foco de atención de
todas sus políticas de liderazgo hotelero en la cultura cliente céntrica y en
paralelo la cultura empleado céntrica, tan importante en las cadenas hoteleras
de lujo. Porque si el capital humano no es feliz en su lugar de trabajo, esto
se verá reflejado en que el cliente al final no va a estar feliz en ese hotel y
el capital financiero se verá mermado. También, me gustó mucho la política de
incentivos que aplican al personal. Premiando al mejor empleado cada año y
subiéndoles cuantiosamente los sueldos por serlo. Además de premiar a los
trabajadores que se formen durante su trayectoria laboral, también con
incentivos económicos importantes. ¡Esto hay que premiarlo! Básicamente, porque
sirve de ejemplo a los otros trabajadores.
Como es por todos sabido, las diferencias políticas e
ideológicas entre Corea del Norte, que implantó reformas comunistas a gran
escala, y Corea del Sur, que conservó el sistema capitalista bajo un
gobierno afín a EE. UU., se han profundizado en los últimos años, lo que
resultó en la creación de dos Estados separados en conflicto
entre ellos.
Mientras que Corea del Norte está bajo una dictadura
totalitaria y comunista, Corea del Sur tiene un sistema más permisivo y
democrático. Esto se refleja en la libertad de expresión, los derechos humanos
y la participación política en cada país. Otra diferencia importante se
encuentra en el desarrollo y el progreso.
Corea del Norte es muy conocido por la corrupción y la
falta de libertad de expresión y opiniones. Los medios se encuentran bajo un
estricto control; muchas veces los opositores o los defensores de los derechos
humanos son llevados a prisión, y el gobierno es famoso por su estricta
política de censura. Sufren detenciones arbitrarias, trabajo forzoso,
tortura, la negación del derecho a las creencias y prácticas religiosas y
también la violencia sexual.
Antes de que las diferencias entre el norte y el sur de
Corea, o lo que es lo mismo, entre el comunismo y el capitalismo, anidaran en
esta nación, ésta era un único país llamado Joseon (1392-1910). Fue
un reino dinástico coreano, que duró aproximadamente cinco siglos. Fue
fundado por Taejo de Joseon, en julio del año 1392, y fue reemplazado por el
Imperio Coreano, en octubre del año 1897. Se fundó después de la disolución de
la dinastía Koryo en lo que hoy es la ciudad de Kaesong. Joseon fue
invadida por sus vecinos japoneses al mando de Toyotomi Hideyoshi. Esta guerra
duró siete años y el reino quedó devastado. Numerosos coreanos fueron obligados
a ir a trabajar a Japón ya que la guerra duró siete años. La anexión de Corea
por Japón en 1910 fue un evento decisivo en la historia de Corea. Después de
años de influencia y control japonés sobre Corea, Japón finalmente declaró la
anexión formal del país en agosto de 1910. La anexión significó el fin de
la Dinastía Joseon y la pérdida de la soberanía de Corea.
El 15 de agosto de 1945, como consecuencia de la rendición
de Japón en la guerra del Pacífico, los coreanos finalmente lograron
lo que habían estado esperando desde hacía mucho tiempo: la liberación del
país.
El 20 de julio de 1948, la Asamblea Nacional eligió
presidente del país a Yi Sung-man. Finalmente, se proclamó la República de
Corea el 15 de agosto de 1948, 5 años después del fin de la ocupación japonesa.
Con Syngman Rhee como su primer presidente; el 9 de septiembre de 1948, se
establece la República Democrática Popular de Corea bajo el mando de Kim
Il-sung.
El 25 de junio de 1950, los norcoreanos, con apoyo
soviético y chino, invadieron el sur, respaldado por EEUU. Comenzó una
encarnizada guerra que costó la vida a más de dos millones y medio de coreanos
(80 % de ellos eran civiles), 700.000 chinos y 57.000 miembros de las fuerzas
de las NNUU y devastó todo el país.
Según internet, Corea del Norte exporta al
mundo minerales, productos metalúrgicos, manufacturas (incluyendo
armamento), textiles y productos agrícolas y pesqueros. Entre sus importaciones
destacan: petróleo, carbón, maquinaria y equipo, textiles y grano. Su principal
socio comercial es China.
Por otro lado, en Corea del Sur las principales industrias
son la textil, la siderúrgica, la automovilística, la naval y la
electrónica. Corea del Sur es el mayor productor mundial de
semiconductores. Un semiconductor es todo aquel material que,
dependiendo de las circunstancias —temperatura, presión, radiación y campos
magnéticos—, puede actuar como conductor, permitiendo el paso de la
corriente, o como aislante, impidiendo el paso de la misma.
Los semiconductores se utilizan en casi todos los sectores de
la electrónica. Electrónica de consumo: Los teléfonos móviles,
computadoras portátiles, consolas de juegos, microondas y
refrigeradores funcionan con el uso de componentes semiconductores como
chips integrados, diodos y transistores.
Corea del Sur es un país desarrollado, muy afín a
EEUU y Europa y entre las décadas de 1960 y 1990 contaba con una de las
economías de más rápido crecimiento del mundo. Esta oleada de
crecimiento se logró a través de la fabricación orientada a la exportación y a
una fuerza de trabajo altamente calificada. Educan desde temprana edad en la
cultura del esfuerzo y premian, con incentivos económicos, el esfuerzo que
hagan las personas en ser mejores cada día.
Si aún no te has sumado al fenómeno K-dramas (los dramas
amorosos coreanos reciben el nombre de k-dramas. Se engloban en un
fenómeno que se conoce como la ola coreana o Hallyu y han llevado a un mayor
interés en la cultura y todo lo relativo a lo coreano), recomiendo que lo hagas
empezando, por ejemplo, con “Aterrizaje de emergencia en tu corazón”. Con un
guion súper original y unos giros de trama muy divertidos que, sin lugar a
dudas, no te dejará indiferente.
También se les llama Doramas, es decir, las personas que ven
k-dramas son también denominadas internacionalmente Doramas (ves series
coreanas, cuyo eje central siempre es el amor).
El éxito del k-drama estriba en su contenido amigable e
ingenioso, con “pureza” e “inocencia” han cautivado a todo el mundo, pues
presentan historias de amor y asuntos familiares donde el sexo y la violencia
extrema no están presentes, siendo aptas para todo tipo de audiencias. Además,
por qué no decirlo, los actores y actrices son guapísimos/as.
Querida compañera: ¡Me ha encantado este post! Gracias por resumirnos la historia de Joseon tan brevemente bien. Creo que es una cultura interesante y con muchos valores. Como bien dices, la cultura del esfuerzo es lo que más destaco y la comida es siempre la mejor excusa para sentarse a dialogar y socializar. Son tremendamente inteligentes, sensibles y respetuosos. Sus series y largometrajes están muy bien hechos, con la gran calidad de imagen sin necesidad de demasiados efectos especiales. Los guiones están fantásticamente bien escritos y hechos con mucha naturalidad. La forma en la que mezclan sentimientos entre los personajes hacen que tengas la mirada pendiente de la pantalla todo el tiempo y que no puedas parar de ver un capítulo tras otro. Como artista, los analizo y aprendo muchísimo de ellos. Así que, cuando quieras, nos vamos a Seúl!
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