Una noche de insomnio

La noche me estrelló a la ansiedad de la incertidumbre y en mi pecho encontré la fuerza de mi alma herrumbre: hierro oxidado por océanos de lágrimas bañado. Y me recuerdo, cual anclaje valiente, que si las mujeres de mis otros tiempos lograrlo pudieron la de este momento no será menos. Rota, vacía, triste y sola me he reinventado mil veces. Sanada, plena, alegre y libre resurgiré para mí de nuevo. Que si la puerta que dejé atrás se cerrara yo crearé otras salidas. "Tengo recursos y en mí confío" , mi mantra eterno. Por más que los miedos me muerdan y en un interminable ciclo la fe en mí misma siempre les devuelva. Ana Naira Gorrín Navarro. 31/08/2020