ME CASÉ CON UN BOLUDO

Este sábado fui a ver Me casé con un boludo. Me sorprendió encontrarme por primera vez en mi vida con Adrián Suar, el clon cinematográfico del premio Goya al mejor actor 2016 por Truman, el conocido rostro argentino Ricardo Darín. Para mí son dos clones ambos actores, hasta en la manera de interpretar. Adrián Suar, según la Wikipedia, nació en Queens en la ciudad de Nueva York el 25 de marzo de 1968, hijo de Lilian Keller y de Yehuda Kirzner (Leibele Schwartz) ambos de origen judío que decidieron regresar a su país de origen, Argentina, en 1970. La sonrisa de Darín y de Suar se parecen muchísimo, ¡y ni que digamos esa mirada penetrante de color celeste!  Pero, al parecer, no tienen nada que ver el uno con el otro, salvo en que son actores y argentinos.

En la actriz principal, Valeria Bertuccelli, también encontré un parecido asombroso con la grande del cine americano: Sandra Bullock. Salvando las diferencias físicas pues la Bullock es más guapa, la argentina guarda (desde mi punto de vista) un parecido asombroso con Sandra Bullock en su manera de interpretar y en muchos gestos faciales. ¡Me recordó muchísimo a ella! Aunque la latina (de origen latino europeo, italiana) es muy latina interpretando y ponía mucho énfasis en determinadas escenas, hecho este que le restaba la naturalidad con que la Bullock se desenvuelve ante las cámaras.

Según la wikipedia, Valeria Bertucelli nació en San Nicolás de los Arroyos, Provincia de Buenos Aires, siendo la mayor de tres hermanos.

A los 14 años llegó junto a su familia a la Ciudad de Buenos Aires, después de un breve paso por Wollongong, Australia y Córdoba.

Está casada con el cantante Vicentico, líder de Los Fabulosos Cadillacs, a quién conoció durante el rodaje de la película1000 boomerangs (1995). Tuvieron su primer hijo, Florian, en 1995. Su segundo hijo, Vicente, nació en 2007. Se casaron en Miami, durante una gira de la banda Los Fabulosos Cadillacs.

Entre los temas que su esposo le dedicó se encuentra "C.J." de Los Fabulosos Cadillacs.

En 2012 su pareja se tatuó su nombre en su mano, y dicha imagen fue la tapa de su disco solista “5”.

El argumento de la película, en registro de comedia, emite un mensaje profundo de lo que somos las personas en nuestro día a día ante la gran cámara que es la vida y la  importancia que le damos a la opinión y criterio que los demás tengan de nosotros. Hasta el punto de que, a veces, dejamos de ser nosotros mismos para interpretar el papel de otra persona ajena a nuestra verdadera esencia. Tal vez sólo para complacer a los demás. Éste es el mensaje implícito que yo vi. El explícito lo pueden ver en cualquier sinopsis de la película en Internet. Pero yo prefiero que vean la película y saquen sus propias conclusiones.

Me reí mucho y me hizo mirar mi ego con introspección y análisis evaluativo.

Sin duda alguna, ¡¡recomendadísima!!