sábado, 4 de abril de 2020

Día 21 de confinamiento

Hoy han anunciado que la cuarentena se prorroga quince días más, hasta el 26 de abril, inclusive.Además, hemos tenido la triste noticia del fallecimiento de dos vecinos del Municipio de Santiago del Teide a causa del dichoso Covid-19. Que Dios les tenga en su Gloria y sentido pésame a familiares y amigos/as.





Y, aunque como predijera Joaquín Sabina en su canción, parece que nos hayan robado el mes de abril.,hemos de pensar que en realidad nos lo estamos regalando. Estar en casa no es estar encerrados, es estar a salvo. Así que traten de ver el vaso siempre medio lleno. Se los digo yo que, a veces, me derrumbo y caigo en el subsuelo más profundo. Pero vienen mis espíritus indios a salvarme. https://www.instagram.com/p/B-Z6-f-oDV5/?utm_source=ig_web_button_share_sheet  Les dejo link a mi post con la explicación de por qué digo esto de que vienen mis espíritus indios a salvarme. y link a música sanadora.



Sé que muchos de ustedes tienen temores, la economía de muchas familias se está viendo atrozmente mermada. Ahora hemos de vivir vidas minimalistas y frugales, gastar solo lo necesario para alimentos y productos de primera necesidad.

Creo que todo esto va a suponer el fin de una era, la era del capitalismo exacerbado que nos ha hecho comernos los unos a los otros con una ansiedad brutal. Debemos reaprender a vivir en armonía con nuestro entorno pues estoy segura de que este virus ha sido una llamada de atención, ya se los he dicho, de La Madre Naturaleza.

Escuchar música de nativos americanos siempre me apacigua el alma y me cura mis miedos. Ojalá lograra tener el mismo efecto en ustedes...


Es importante establecer rutinas en nuestro día a día. Levántate siempre a la misma hora de lunes a viernes, come a las mismas horas, divide tu día en bloques de tiempo. Por ejemplo, yo  dedico un tiempo para las labores del hogar junto a mi familia, luego a escribir en el manuscrito de mi quinta novela, otro tiempo a hacer algo de ejercicio (step, caminar, bailar), otro tiempo para estudiar francés online (gracias a mi maravillosa profesora Marie de la Escuela de Idiomas podemos seguir con nuestro aprendizaje y exámenes vía Skype), habla con la gente que te suma, que te aporta, que te hace crecer. Mis amigas de Los Gigantes con quienes mantengo extensas y divertidas charlas sanadoras con terapia de risas incluida siempre, las de la Universidad con quienes no paro de compartir memes absurdos pero que hacen reír, mi amigo Julián quien me aguanta mis paliques insufribles  de borrachita de vino tinto a las tantas y hasta acepta leer con suprema paciencia borradores de los manuscritos de mis novelas. Lo siento amigo, he pasado de pihippy a piripi desde que empezó la cuarentena, mi amigo Jan el vikingo quien me ameniza las jornadas de escritura mandándome vídeos hechos por él con él cantando con su dulce voz vikinga. ¡Gracias a todos/as por existir y salvarme de la depresión! 

Mención especial he de hacer a mi hijo que siendo un adolescente aguanta estoicamente el encierro y comprende que no se puede salir, pese a él ser un espíritu libre y león salvaje que precisa el aire puro de la calle como el agua para vivir. ¡Ya vendrán tiempos mejores, hijo! Ahora tenemos que resistir y aguantar todos juntos. A Dios gracias estamos en familia y nos protegemos y cuidamos los unos a los otros. A Dios gracias también tenemos un techo, comida y el sol de Los Gigantes para insuflarnos energía desde nuestra terraza junto a nuestros ángeles guardianes, nuestros perros. Bendiciones pues a ellos sí se les puede abrazar ¡y dar abrazos es necesario, al menos para mí que soy una persona tan afectiva y cariñosa!

Sueño con el momento de poder hacer una reunión familiar con  mis hermanos, mis sobrinas, mi familia en toda su extensión (tíos, primos,...) irnos a comer y luego reír y abrazarnos todos. Poder ir con mi hijo al cine y ver una película juntos antes de ir a cenar como hacíamos cada domingo. Salir a bailar a una discoteca latina por la noche de un sábado, que esté de bote en bote y no me importe. Bailar bachata, salsa, ..., con mil personas y que no me obsesione enfermar y morir. Sueño con poder ir a la playa de Troya, coger sol todo el día y beber cerveza como un cosaca con mis amigos de siempre. 

Sueño con que todo vuelva a la normalidad, pero ya advertidos de que los dueños del planeta no somos los humanos y que hemos de vivir cada día con humildad y bondad. Ser buenos, porque es lo único que nos queda en esta vida, ser buenos y tener fe y esperanza en la humanidad y en que saldremos adelante. 



¡No decaigamos que aún nos quedan muchos días por delante! Un abrazo inmenso y que miles de estelas de amor infinito y puro les alcance, les reconforte y les ayude a mantener la esperanza. 







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