Me gusta cómo se escribe este año que recién estrenamos, con el aroma que poseen las cosas nuevas.
Tengo claro que no voy a tener en mente publicar ninguna novela, aunque sí escribirla. Dije que escribiría un libro cada año y lo voy a cumplir, es una promesa conmigo misma. Pero para publicar mis siguientes novelas no voy a tener tanta prisa, quiero sacar el máximo margen de beneficio a las cuatro que ya tengo publicadas. Y, con este objetivo posible en mi vida, me sumergiré en el océano de la tranquilidad como el que me evoca la voz del ya difunto Israel "IZ" , la voz de este hawaiano me transporta a un sosiego similar al que me sumerjo cuando escribo mis novelas.
Doy eternas gracias por todo cuanto poseo en mi vida y pido perdón si alguna vez me he despertado negativa, cansada u obstinada con cosas banales.
No puedo dejar de vivir con la mentalidad que ha regido mi sino desde que nací: la filosofía hippie. Si algo ha de suceder, hagas lo hagas, acontecerá. Y si no se da, pues - como dice un buen amigo mío italiano-: "ya me buscaré la vida yo por otro lado, mi suerte me la creo yo en el sentido de que yo decido si lo que me pasa me afecta o no. Simplemente recogeré mis escasas pertenencias y continuaré mi camino por otro sendero alternativo".
Y así de frugal seré por la vida en todo, pues esto es lo que realmente me da la felicidad a mí. ¡El total sentimiento de libertad!
Porque siempre: ¡¡habrá alguien al otro lado del arco iris!!