Debe tener propiedades medicinales. Si un día
estás de capa caída, falto/a de energía y con cansancio anímico. Prueba a
darte un baño en la playa de Los Guíos, Los Gigantes. Prueba a hacer el
muerto mirando a Los Acantilados. Déjate arrullar
por la nana guanche que la esposa de Tinerfe cantaba a sus hijos y que
aún se escucha en el sonido de sus olas. Tal vez el magma, tal vez los
minerales de Los Acantilados de Los Gigantes,
tal vez simplemente que yo misma soy una de las entrañas de Los
Acantilados, una roca más de ellos, pero... ¡SON MI FUENTE DE VIDA!
Llevo su imagen grabada a fuego en mis pupilas. Siempre, donde quiera
que esté y adonde quiera que vaya: ¡Mis Acantilados del alma y su
entrañable playa!
No hay comentarios:
Publicar un comentario